Blog

Efectos de la cannabis en el organismo

26 septiembre, 2014

MICHELLE ZEPPELIN, ESTUDIANTE DE MEDICINA UFT

El uso de cannabis ha estado sujeto a distintas controversias por sus efectos secundarios, especialmente a nivel del sistema nervioso central, sobre todo cuando se utiliza como alucinógeno. Sin embargo, se han encontrado aplicaciones terapéuticas que van en beneficio de una serie de patologías, lo que también ha sido discutido, por los efectos negativos sobre la función encefálica.

La marihuana se describe como el conjunto de tallos y hojas de la planta Cannabis, que fue una de las primeras plantas cultivadas por el hombre en China, hace 4000 años a.C, y a partir de ella se fabricaban cuerdas, textiles e incluso papel.

En la marihuana se han descrito más de 400 sustancias, de las cuales más de 60 son canabinoides, estos son sustancias psicoactivas que se encuentran en la mayor parte de la plata Cannabis. Y de los cuales tres son los principales: delta-9-tetrahidrocanabinol (Δ9-THC), el canabinol (CBN) y el canabidiol (CBD)1. El Δ9-THC es el principal componente psicoactivo de la marihuana, y esto es dado por su facilidad de absorción en el organismo.

A partir de los efectos observados en consumidores de marihuana, se pensó que debiera existir un sistema propio del organismo que también generara estos efectos, pero de manera endógena. Es así, que mediante los estudios realizados en relación a dilucidar esta hipótesis, se encontró que efectivamente existe un sistema al que se llamó “sistema endocanabinoide”, el cual está constituido por una serie de elementos, entre los que destacan dos receptores: CB1 y CB2, los cuales deben activarse para desencadenar al resto del sistema. Este tiene un papel modulador en diferentes procesos fisiológicos, dentro de los cuales está la memoria, regulación de la actividad motora, desarrollo cerebral, aprendizaje y también tienen importancia en el sistema inmune.

El receptor CB1 es el encargado de regular los efectos psicoactivos de los canabinoides y, de hecho, es un receptor presináptico cuya función principal es la modulación de la liberación de algunos neurotransmisores, como dopamina, noradrenalina, glutamato, GABA y serotonina2.

Los efectos del consumo de marihuana afectan a varios órganos, y son tanto agudos como crónicos.

De manera aguda, se produce un aumento de la frecuencia cardíaca, relajación de bronquios y ensanchan, y los ojos pueden adquirir un aspecto enrojecido, debido a la dilatación de los vasos oculares, esto además puede acompañarse de temblor, sequedad de boca y garganta3.

Los efectos crónicos se deben a la interacción del Δ9-THC con el receptor CB1, y se asocian a una disminución de la memoria a corto plazo, producida por la afectación de procesos de plasticidad en el hipocampo, a la capacidad de concentración, alucinaciones, delirios y desorientación.

Además, también el Δ9-THC disminuye la coordinación y el equilibrio, por su unión al receptor en ganglios basales y cerebelo.

Si bien no se ha logrado comprobar que el consumo de cannabis, especialmente en adolescencia tenga una relación directa en facilitar el posterior consumo de otras drogas, lo que sí se sabe es que el consumo temprano aumenta el riesgo de desarrollar una enfermedad psiquiátrica, especialmente psicosis, y más si son individuos vulnerables4.

La relación entre cannabis y cáncer de pulmón ha sido contradictoria; Según la British Lung Foundation, el consumo de cannabis por día durante un año aumenta un 8% el riesgo de cáncer de pulmón, señalando que el humo del cannabis tiene el doble de la concentración de los componentes de hidrocabonos poliaromáticos que el tabaco, los cuales son carcinogénicos5.

Por otra parte, investigadores de la Universidad de Harvard, señalaron que el Δ9-THC detiene el crecimiento del tumor en el cáncer de pulmón así como su capacidad metastásica, ya que inhibe factores de crecimiento, por lo que se postula podría llegar a ser una manera de tratarlo, aunque sólo es una hipótesis, puesto que se contrasta con el rol carcinogénico del cannabis que se ha publicado en otras investigaciones6.

En una investigación publicada en el European Journal of Immunology, el equipo de científicos, dirigido por el doctor Prakash Nagarkatti, de la Universidad de Carolina del Sur, Estados Unidos, estudió el efecto de los cannabinoides en el sistema inmune y encontraron que promueven la producción de células que debilitan la resistencia del cuerpo frente al desarrollo de infecciones y determinados tumores, debido a que aumenta un tipo de células conocidas como células supresoras derivadas de línea mieloide (MDSC) que se encargan de suprimir las defensas del organismo, es decir, generan inmunosupresión. Esta investigación es muy importante, ya que el uso de cannabis en cáncer potenciaría efectos adversos al estimular a estas células que se sabe que promueven el crecimiento del tumor7.

En el tratamiento del cáncer, la cannabis ha sido utilizada por la acción antiemética, especialmente en relación a los vómitos producidos por los tratamientos de quimioterapia, los cuales son muy frecuentes y muchas veces hacen que las personas no quieran continuar con el tratamiento, por lo que es de vital relevancia el uso de algún antiemético8.

También, la cannabis se ha utilizado en tratamiento contra depresión, ansiedad y trastornos del sueño, de hecho, cuando se empezó a recomendar la cannabis de forma terapéutica, uno de los primeros usos fue para la depresión. Sin embargo, esto ha sido contradictorio, ya que solo algunos de los tratados con cannabis reflejaron una mejoría, debido a los efectos indeseables que ésta tiene y que fueron en desmedro del tratamiento, por lo que no es muy aceptada para estas patologías9.

Se ha estudiado la modulación del dolor por parte de los cannabinoides y específicamente del Δ9-THC, ya que se ha observado que pueden tener un efecto analgésico, como en el dolor canceroso10 y en el de lesión de médula espinal de mayor duración que el que tienen otros medicamentos, y también se ha postulado una acción antiinflamatoria11.

También se ha visto que los cannabinoides pueden potenciar la acción de otros fármacos, por ejemplo de antiinflamatorios no esteroideos.

En pacientes con esclerosis múltiple el Cannabis bien por inhalación o con la administración oral de dronabinol puede aliviar los síntomas de la enfermedad, pero esto en varias ocasiones se ha asociado más a una mejoría subjetiva que a una disminución de los signos objetivos de ella12.

En relación al tratamiento de la anorexia, el cannabis estimula el apetito, por lo que podría ayudar en casos de grandes pérdidas de peso, en pacientes que no poseen ganas de comer, y que están en gran riesgo por las condiciones físicas en que se encuentran13.

Si bien parece que la cannabis posee una diversa gama de efectos terapéuticos, en el caso de algunas personas, especialmente quienes consumen altas dosis, podría generar lo que se llama “síndrome de privación”14, que se presenta como ansiedad, irritabilidad, problemas para dormir e incluso náuseas y vómitos, al suspender su consumo. Además, podría ser adictiva por la sensación de calma y bienestar que produce, esta situación se agrava cuando su uso es a largo plazo, se estima que el 9 por ciento de las personas que consumen marihuana se vuelven dependientes y si se comienza tempranamente las estadísticas señalan que sería 1 de cada 6 personas las que se vuelven adictas.

Por lo tanto, se puede notar que existen pros y contras del consumo de la cannabis, y que serán necesarias más investigaciones para continuar dilucidando las bondades y los efectos adversos de su potencial uso terapéutico.

Referencias

(1-2) Netzahualcoyotzi-Piedra C, Muñoz-Arenas G, Martínez-García I, Florán-Garduño B, Limón-Pérez de León I. La marihuana y el sistema endocanabinoide: De sus efectos recreativos a la terapéutica. Rev Biomed 2009 20:128-153. Recuperado el 11/08/2014: http://www.revbiomed.uady.mx/pdf/rb092026.pdf

(3) Abuso de la marihuana, ¿Cómo afecta la marihuana al cerebro y al resto del cuerpo? Recuperado el 11/08/2014: http://www.drugabuse.gov/es/publicaciones/abuso-de-la-marihuana/como-afecta-la-marihuana-al-cerebro-y-al-resto-del-cuerpo

(4) Sagredo O. Efectos farmacológicos y fisiológicos del consumo de cannabis. Trastornos Adictivos 2011;13(3):94-96, Elsevier Doyma. Recuperado el 09/08/2014: http://apps.elsevier.es/watermark/ctl_servlet?_f=10&pident_articulo=90098141&pident_usuario=0&pcontactid=&pident_revista=182&ty=122&accion=L&origen=elsevier&web=www.elsevier.es&lan=es&fichero=182v13n03a90098141pdf001.pdf

(5) The impact of cannabis on your lungs. British Lung foundation (2012). Recuperado el 09/08/2014: http://www.blf.org.uk/Page/Special-Reports

(6) Preet A, Ganju R, Groopman J. {Delta}-9 Tetrahydrocannabinol inhibits growth and metastasis of lung cancer.Oncogene. 2008 Jan 10;27(3):339-46. Epub 2007 Jul 9. Recuperado el 09/08/2014: http://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/17621270

(7). Hegde V. L, Nagarkatti M, and Nagarkatti P. S. Cannabinoid receptor activation leads to massive mobilization of myeloid-derived suppressor cells with potent immunosuppressive properties. European Journal of Immunology. Dec 2010;40(12):3358-71 . Recuperado el 05/08/2014: http://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/21110319

(8) Machado Rocha FC, Stéfano SC, De Cássia Haiek R, Rosa Oliveira LM, Da Silveira DX. Therapeutic use of Cannabis sativa on chemotherapy-induced nausea and vomiting among cancer patients: systematic review and meta-analysis. European Journal Cancer Care (Engl). 2008 Sep;17(5):431-43. Epub 2008 Jul 9. Recuperado el 08/08/2014.

(9) De Mello Schier AR, de Oliveira Ribeiro NP, Coutinho DS, Machado S, Arias-Carrión O, Nardi AE, Silva AC. Antidepressant-Like and Anxiolytic-Like Effects of Cannabidiol: A Chemical Compound of Cannabis Sativa. CNS and neurological disorders drug targets. 2014 Jun 12;13(6)1 ISSN (Print): 1871-5273; ISSN (Online): 1996-3181. Recuperado el 05/08/2014: http://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/24923339

(10) Guindon J1, Hohmann AG. The endocannabinoid system and cancer: therapeutic implication. British Journal of Pharmacology. 2011 Aug;163(7):1447-63. Recuperado el 05/08/2014: http://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/21410463

(11) Xiong W1, Cui T, Cheng K, Yang F, Chen SR, Willenbring D, Guan Y, Pan HL, Ren K, Xu Y, Zhang L. Cannabinoids suppress inflammatory and neuropathic pain by targeting α3 glycine receptors. The Journal of Experimental Medicine. 2012 Jun 4;209(6):1121-34. Recuperado el 04/08/2014: http://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/22585736

(12) Syed YY1, McKeage K, Scott LJ. Delta-9-tetrahydrocannabinol/cannabidiol (sativex(®)): a review of its use in patients with moderate to severe spasticity due to multiple sclerosis. Drugs.2014 Apr;74(5):563-78.Recuperado el 11/08/2014: http://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/24671907

(13) Lorenzo, P.; LEeza, J.C. Utilidad terapéutica del Cannabis y derivados. Recuperado el 09/08/2014: http://adicciones.es/files/lorenzo%20149-168.pdf

(14) Abuso de la marihuana, ¿Es adictiva la marihuana? Recuperado el 05/08/2014: http://www.drugabuse.gov/es/publicaciones/serie-de-reportes/abuso-de-la-marihuana/es-adictiva-la-marihuana